Martillo de siete puntas

Muy utilizado en acupuntura y un excelente compañero para combinar con todo tipo de tratamientos. 

 

Es una técnica de estimulación de la piel, mediante un martillo de plástico fino con un cabezal de 7 agujas muy finas, distribuidas en círculo. Su acción es tonificante, estimula un punto o una zona. Es un tratamiento muy eficaz y puede combinarse con el masaje o la acupuntura.

 

Es útil tanto en enfermedades agudas como crónicas, en los tratamientos estéticos es especialmente útil para la obesidad, alopecia, y trabaja de maravilla la papada, aunque estos tratamientos hoy se realizan preferentemente mediante rodillo dermatológico.

 

Trabaja muy bien sobre todo tipo de problemas musculares, en tendinitis.

 

Se percute sobre la zona a tratar, esta percusión sobre la piel con pequeñas y finas agujas generan la irritación del área afectada, produciendo calor, otorgándole al meridiano la energía suficiente como para reactivar la curación de la enfermedad.

 

 

Se puede percutir sobre una zona sobrecargada como una contractura o tendinitis, consiguiendo un alivio inmediato, al extraer la sangre que está provocando la inflamación.